“tengo el grito tan pleno
Nomas el hambre me crece
Me vomito, me indigesto.
El mundo se me oscurece”
(Daniela Melendez)
A partir de elementos dancísticos y musicales de los sones de arpa grande de la tierra caliente de Michoacán, esta historia cuenta la vida de un personaje que se enfrenta a un aislamiento extremo, enfrentándose a sus propias sombras y cuya única fuente de placer la obtiene a través de la comida; situación que la hace caer en cuadros compulsivos que terminan devorándola.